Noalla sopesa la vía judicial para recuperar el istmo de A Lanzada

La batalla por la titularidad del monte de A Lanzada no ha terminado. La Comunidade de Montes de Noalla está dispuesta a acudir a la vía judicial para reclamar la propiedad del terreno, que incluye el istmo de O Bao. El presidente del colectivo, Roberto Garrido, entiende que "hai que actuar con cautela", pero deja claro que la opción de apelar ante el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo de Pontevedra es una posibilidad real.

La última ‘derrota’ ante el Xurado de Expropiación de Clasificación de Montes Veciñais en Man Común de Pontevedra, que en un escrito publicado en el Diario Oficial de Galicia (DOG) la pasada semana descartaba clasificar los terrenos de A Lanzada como comunales, no ha hecho mella en el ánimo de la agrupación sanxenxina. El propio Garrido recuerda que esta última resolución "xa se nos comunicou hai meses". Es por ello por lo que los servicios jurídicos de la Comunidade de Montes ya han presentado un último recurso de reposición, con carácter potestativo, ante el organismo dependiente de la Consellería do Medio Rural. Si su respuesta vuelve a ser negativa, los comuneros de Noalla están dispuestos a iniciar un contencioso, ya que "temos argumentos para pensar que eses terreos pertencen á nosa parroquia".

De esta manera, todo apunta a que este arduo proceso, que el propio Xurado de Expropiación define como "sumamente complexo e dificultoso, non só polos numerosos antecedentes legais e intereses en xogo da CMVMC de Noalla e dos concellos de Sanxenxo e O Grove, senón pola propia repercusión social e mediática que ten, así como pola especial configuración xurídica dos terreos afectados pola clasificación", se podría prolongar durante varios años más. Todo comenzó en 1989, cuando se determinó que las parcelas eran propiedad de la Comunidade de Montes de Noalla.

RECURSOS. No obstante, en 2003 el Concello de O Grove presentó una solicitud de revisión de oficio ante la Xunta de Galicia. El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo de Pontevedra dio la razón a la Administración local meca. Comenzó entonces un intercambio de golpes, en forma de presentación de diferentes apelaciones por parte de los Comuneros de Noalla y del Ayuntamiento grovense, que se ha prolongado hasta la actualidad, máxime después de que en 2012 el Xurado Provincial de Montes se desdijese de su primera resolución y ordenase la revisión de la titularidad del istmo.

Mientras que los comuneros de la parroquia de Noalla recuerdan que las parcelas fueron utilizadas históricamente por los vecinos de la localidad, el ente autonómico puntualiza en su último escrito que "o uso da parcela na actualidade está moi condicionado polo feito de que na súa totalidade se atopa incluída dentro dun espazo natural protexido e praias", concluye.