Tordesillas celebra este martes su segundo Toro de la Vega sin muerte en público del animal. Príncipe, un astado de cinco años y medio y 630 kilos de peso, es el protagonista este año de una celebración polémica. Un participante en el festejo resultó herido de gravedad tras ser corneado.
Una menor afluencia de público, la atenuación del dispositivo de seguridad y la total ausencia de protestas de organizaciones contrarias a la celebración de espectáculos taurinos han sido, en comparación con años precedentes, las notas características del Toro de la Vega 2017.
Un cuarto de hora antes del inicio del festejo, un manifiesto público escuchado desde los altavoces del recorrido ha reclamado el derecho de los aficionados y de los vecinos de Tordesillas a disfrutar del Toro de la Vega en su formato tradicional, con lanceros de a pie y a caballo, erradicado durante el verano de 2016 fruto de una "injusta imposición" de orden legal, según el texto.
Así hemos vivido el Toro de la Vega en DIRECTO en @LaMananaTVE Ambiente tranquilo por la ausencia de antitaurinos https://t.co/PdbwwySsTG pic.twitter.com/GK9t3AazPn
— RTVE (@rtve) 12 de septiembre de 2017