Nueva inspección para las empresas que ganan más de un millón de euros

El Concello pondrá en marcha una nueva campaña contra la morosidad. En este caso se centrará en el Impuesto de Actividades Económicas (IAE), que es el que pagan todas las empresas ubicadas en Pontevedra que facturan más de un millón de euros al año. El portavoz municipal y concejal de Facenda, Raimundo González Carballo, aseguró este lunes que el objetivo de esta actuación es lograr la equidad tributaria que persiguen todas las administraciones. Para llevarla a la práctica, la Xunta de Goberno local dio este lunes el visto bueno al proceso de contratación de la empresa que llevará a cabo las tareas de inspección. El contrato contará con un presupuesto de 71.995 euros y un plazo de ejecución de dos años. En este tiempo se tendrá que revisar el actual padrón y verificar si existen negocios que defraudan a la hacienda local.

González Carballo asegura que este tipo de controles son eficaces. En el último de ellos se detectaron seis compañías que no habían cumplido con su obligación con el IAE, un impuesto que, según el portavoz municipal, supone ingresos anuales de 1,8 millones de euros, "un 15% máis que durante os últimos anos grazas a estas inspeccións". Ésta no es la primera campaña que Pontevedra lidera para destapar posibles impagos de este tributo, un trabajo que se realiza por sectores. Los que todavía no se han controlado son los siguientes: el de la banca, los supermercados, los aparcamientos o el de los hoteles. Tampoco se ha revisado el IAE de las empresas con sede social en Pontevedra situadas en el Puerto de Marín.

888 EN 2015. Los últimos datos disponibles, correspondientes al ejercicio de 2015, revelan que las empresas que pagan el IAE en Pontevedra ascienden a 888. Un año antes, en 2014, eran 918.

A pesar de esta situación, el impago del impuesto que deben abonar las empresas que ganan más de un millón de euros al año (entre las que se encuentran Ence o Elnosa) no es el que más morosidad registra.

La última memoria de Recyges, la firma encargada del servicio de recaudación municipal, pone de manifiesto que el Concello de Pontevedra cerró 2016 con algo más de 27,6 millones de euros de deudas de vecinos y empresas, lo que supone un 4,6% más que durante el año anterior.

El dinero pendiente de ingresar por parte de los contribuyentes darían para pagar algunas de las obras estrella prometidas por la Xunta para la ciudad, como el edificio judicial de A Parda.

El Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), la viñeta y el agua fueron las tasas que más deudas generaron en el municipio: 3,78 millones de euros.

Las multas de tráfico tampoco se libran de la acción de los morosos. Recyges dio orden de cobro de este tipo de sanciones por valor de más de 495.000 euros durante el año pasado. Finalmente, solo logró ingresar algo más de la mitad del importe de las infracciones: 260.000 euros.

Aún así, la concesionaria logró cobrar algo más de 3,6 millones de euros por la vía ejecutiva, la que se abre después del pago voluntario de tasas e impuestos locales.