Roberto Fernández: "Soy autónomo, tengo cáncer y me niegan el derecho a una prestación por la baja"

Este hombre diagnosticado de un tumor cerebral, lleva cuatro meses sin ningún ingreso por una deuda con la Seguridad Social
Roberto en la redacción de Diario de Pontevedra
photo_camera Roberto en la redacción de Diario de Pontevedra

Roberto José Fernández Portela, natural de Pontevedra y de 37 años de edad, se siente "indignado" por el trato que está recibiendo de la Administración, a la que acusa de darle la espalda.

Autónomo de profesión, fue diagnosticado el pasado 17 de febrero de un tumor cerebral "agresivo y de un tamaño considerable". La situación le llevó a solicitar la baja y a acabar cerrando las puertas del negocio informático que mantenía abierto en la calle Javier Puig. Su situación económica se agrava por estas circunstancias, pero la causa real de su enojo es que la mutua (que gestiona las retribuciones de los autonómos) le dice que no tiene derecho a una prestación por estar de baja.

Roberto, separado y padre de dos hijos, subraya que lleva cotizando "desde los 16 años" y que jamás ha cobrado "el paro ni ningún tipo de ayuda". "Siempre enlacé un trabajo con otro y ahora me encuentro con esto. Es indignante. Una persona que viene de fuera y que jamás ha cotizado cobra 400 euros. Sin embargo yo, que siempre he cumplido con mis obligaciones, no recibo nada. Soy autónomo, tengo cáncer, y me niegan el derecho a cobrar la baja", critica.


La mutua reconoce que si la baja fuese provocada por un accidente cabría la posibilidad de retribución, 
"pero por un tumor, no"


El afectado se ha visto obligado a tirar de los recursos de su familia, si bien advierte que su situación "tampoco es boyante" y que ya ha tenido que suspender la pensión de sus dos hijos.

Su talón de Aquiles es una deuda que tiene contraída con la Seguridad Social. Roberto abrió en noviembre de 2012 la empresa, arrastrado por la ilusión de montar su propio negocio. Sin embargo, la actividad no dio los frutos esperados, "el dinero no aparece por ningún lado", y se vio abocado a dejar de pagar las cuotas de autónomos. La deuda supera actualmente los 8.000 euros, de los que un 20% ya se corresponden con intereses de demora.

El 3 de febrero la Seguridad Social le concedió un aplazamiento para que pudiera abonar las cantidades pendientes en plazos de 150 euros mensuales. Por este motivo, Roberto asegura que no tiene ninguna reclamación pendiente con la Seguridad Social.

DENUNCIA. Fraternidad Muprespa, la responsable de gestionar su expediente, alega que el aplazamiento de la deuda fue revocado en junio, ante la falta de movimientos por parte del denunciante, y que el segundo aplazamiento (autorizado hace unas semanas) es inválido, porque es posterior a la baja, "al hecho causante".

La entidad insiste en que ha hecho todo lo posible para que el afectado reciba algún tipo de retribución, pero que la normativa lo impide. "Lo que dice la Ley es que tienes que pagar las cuotas para tener derecho a la prestación, no al revés. Si fuera por un accidente de trabajo, sí que cabría la posibilidad, pero por un tumor (considerado como enfermedad), no".

La delegación local del Instituto Nacional de la Seguridad Social secunda lo dicho por la mutua: "La normativa exige estar al día en el pago de las obligaciones". Lo que no explica ninguna de las dos instituciones es porqué no se contemplan excepciones para las particularidades del caso de Roberto y otros en su misma situación.

El afectado denuncia que su historia es la de la pescadilla que se muerde la cola. En los últimos cuatro meses fue ingresado varias veces en el hospital y sometido a pruebas previas al tratamiento oncológico, "sin poder hacer frente a los pagos de autónomos ni al aplazamiento". En total lleva cuatro meses sin recibir ningún tipo de ingreso, "porque, pese a haber presentado los partes médicos, no he cobrado un solo mes de baja (valorada en su caso en 670 euros).

El afectado ha revolucionado las redes sociales con tres vídeos en los que relata su viacrucis. Además, avanza que denunciará su caso ante la Valedora do Pobo y que incluso presentará una denuncia ante los tribunales con la ayuda de la Asociación Española Contra el Cáncer.

Roberto sigue sin entender "por qué los autónomos estamos tan desprotegidos por la Administración, cuando somos un sector que estamos levantando el país". En su caso, "trabajaba entre 14 y 15 horas al día y ni siquiera podía disfrutar de la familia" para obtener unas ganancias que, a todas luces, se quedaban cortas.

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