La 'bosta' de la suerte que se hizo de rogar

La deposición de la fortuna se hizo de rogar el domingo en la parroquia de Borela. La Cagada da vaca, una original iniciativa impulsada por la Comisión de Festas de la localidad para recaudar fondos para los festejos patronales, no se hizo realidad hasta las ocho menos cuarto de la tarde. Casi tres horas y media tuvieron que aguardar los participantes en este peculiar sorteo, que se congregaron en el campo de tiro de la villa para comprobar en cuál de las parcelas en las que se dividió el terreno haría sus necesidades la vaca.

Inspirándose en una iniciativa que en su día realizó un equipo de fútbol de Lugo para costearse la renovación de sus equipaciones, la agrupación vecinal de Cerdedo-Cotobade apostó por la misma fórmula para poder costear la programación de las fiestas de Borela. El particular sorteo resultó todo un éxito. La Comisión de Festas recaudó unos 7.000 euros (por la apuesta de cada parcela se cobraban dos euros de tasa). Cabe recordar que las celebraciones en honor al patrón tendrán lugar durante los días 4 y 5 de agosto.

EXPECTACIÓN. Como no podía ser de otra manera, la Cagada da vaca levantó una enorme expectación este domingo en la localidad del municipio fusionado de Cerdedo-Cotobade. Al margen de los participantes en el concurso, también se acercaron al campo de tiro numerosos curiosos, que optaron por no perderse detalle de la iniciativa, a pesar de que las temperaturas que se registraron durante buena parte de la tarde fueron más que notables.

La presidenta, Katia Malvar, valoró positivamente los resultados de la iniciativa. Además, se mostró feliz por el hecho de que el ganador de este particular sorteo fuese un vecino de la propia parroquia. "Vendimos rifas por diferentes localidades", aseveró.

La Comisión de Festas no dejó nada al azar. De hecho, una de las razones por las que hubo que esperar tanto tiempo para conocer el ganador fue porque la vaca soltó su primera deposición con antelación. "Lo hizo a las 16.45 horas, pero en las bases se estableció que solo valiese la primera cagada que fuese posterior a las 17.00 horas, para evitar cualquier suspicacia", indicó la presidenta, que añadió que las heces "quedaron justo en el centro de la parcela ganadora, así que no hubo problemas". Por tanto, no fue necesario recurrir a un topógrafo para solventar posibles dudas.

"La vaca se lo tomó con un poco de calma", reconoció Malvar. El animal, de hecho, permaneció acostado durante un buen rato. "Tuvimos que hablarle para que se levantase". Al final, la paciencia del ganador fue recompensada. Además, la comisión también hizo caja con la cantina instalada en el campo de tiro, que será también para las fiestas.