El Parlamento no pedirá modificaciones en la ley del sector eléctrico

El PP alega que los gallegos no asumirán sobrecostes ambientales y rechaza una propuesta del PSdeG apoyada por el BNG y En Marea

El PP ha rechazado la toma en consideración de una proposición de ley que los socialistas pretendían trasladar al Congreso para cambiar varios preceptos de la norma de 2013 que, según ha defendido el diputado Abel Losada, abren la puerta a "trasladar a los consumidores" el sobrecoste de los impuestos medioambientales que tienen que afrontar las operadoras eléctricas.

La iniciativa, que ha sido respaldada por los diputados de En Marea y BNG, no ha salido adelante debido al voto negativo de los populares. Encargada de defender la postura de su grupo, la diputada del PPdeG Marta Nóvoa ha negado que los consumidores gallegos vayan a asumir sobrecostes en sus facturas ligados a los impuestos medioambientales a las eléctricas.

Nóvoa ha subrayado que el Gobierno gallego se ha manifestado de forma "expresa" en contra de esta cuestión y ha indicado, además, a los socialistas, que la ley de 2013 recoge de forma "opcional" la posibilidad de que las empresas puedan repercutir en el consumidor los sobrecostes generados, por ejemplo, por impuestos medioambientales autonómicos.

También lo hacía, ha añadido la popular, la norma impulsada en el año 97 por el Gobierno de José María Aznar, mientras que, ha afeado, "los socialistas pretendían con sus enmiendas" en el año 2013 que ésta cuestión no fuese "una posibilidad, sino obligatoria", aunque éstas no salieron adelante.

Sin embargo, Abel Losada (PSdeG) ha defendido la propuesta de su grupo y ha subrayado que tanto la ley de 1997 como la de 2013 se hicieron bajo el mandato del PP. Al tiempo, ha incidido en que las enmiendas que los socialistas defendieron hace cuatro años se impulsaban "en un contexto económico concreto", en el que había una importante caída de ingresos.

"Ante la generalización, ya que la mayor parte de comunidades estaban introduciendo esta fiscalidad, nos parecía razonable", ha señalado el socialista, convencido de que ahora toca modificar esta ley que, tal y como está formulada, "significa que, en vez de que quien contamina paga, paga el que sufre la contaminación".

APOYO DE EN MAREA Y BNG

Por su parte, la diputada nacionalista Noa Presas ha ratificado el apoyo de su grupo a esta iniciativa, si bien ha recordado al PSOE que "en algún momento" gobernó en el Estado entre la ley promovida por el Gobierno de Aznar y la del año 2013 sin que hubiese optado por acabar "con los privilegios de las operadoras".

La diputada ha censurado que los consumidores "puedan acabar pagando" en sus facturas sobrecostes territoriales por impuestos medioambientales (como el canon eólico) y "menos aún en un territorio productor excedentario como es Galicia". Así, ha abogado por "lanzar un mensaje" desde el Legislativo frente al "expolio" de las eléctricas.

Al tiempo, ha apelado a ser "más ambiciosos" y, toda vez que el BNG defiende una tarifa eléctrica gallega, a luchar por la "vía legal" para que se le permita a la comunidad dotarse de "una política energética" propia.

Francisco Casal (En Marea) también avanzó el voto favorable de su grupo a la iniciativa socialista, aunque ha concluido que "no soluciona el problema", toda vez que la ley seguiría manteniendo la posibilidad de que "cualquier incremento de gasto tendrá que ser compensado con un aumento de ingresos".

"Si no lo pagan directamente los consumidores, lo pagarán a través de los Presupuestos Generales del Estado", ha reflexionado, antes de identificar la situación del sector eléctrico con "la mayor estafa que hay en este momento en España. "El sector es intocable y todos ustedes lo saben, solo hay que mirar quiénes están en los consejos de administración (de las eléctricas)", ha aseverado.

Finalmente, Marta Nóvoa se ha reafirmado en que la vía se plantea de forma "opcional" y los gallegos no pagarán en sus facturas los sobrecostes medioambientales de las operadoras. Así, ha vuelto a defender la política energética del PP y ha concluido que "lo demás es tratar de alarmar y confundir a la población".

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