"Hemos venido por él"

En el espíritu del deporte vive la pasión de los aficionados y un partido de fútbol siempre está cargado de historias desconocidas. Entre los miles de hinchas granates que acudieron el sábado a Pasarón se encontraba una familia que vivió el encuentro de forma especial.

Antes del pitido inicial, se honró la memoria de un fiel seguidor del Pontevedra que falleció la semana pasada después de tres años luchando contra el cáncer, Juan Carlos Casado. La megafonía del campo de O Burgo honró su memoria y su fidelidad.

En la grada de Tribuna se encontraban su mujer, Berta Aguilar, sus dos hijos y su pequeño nieto.

Juan Carlos Casado nació en Madrid, pero en cuanto se mudó a Pontevedra decidió hacerse socio del equipo de fútbol de la ciudad y nunca faltó a su cita quincenal en el estadio. Le diagnosticaron un cáncer y su salud se resintió, aunque su mujer afirmó que "no se perdió nunca un partido". "Ahora estaba ya muy malito, pero siguió viniendo a Pasarón", añadió orgullosa con su bufanda del Pontevedra Club de Fútbol.

Los hijos de Juan Carlos, que viven en la capital de España, le rindieron un particular homenaje viendo junto a su madre el partido de la fase de ascenso contra el Real Murcia.

Su hija Isabel, ataviada con una camiseta granate, comentó que "vinimos aquí por él y entendemos por qué le gustaba tanto: el ambiente ha sido espectacular". A pesar de que el resultado no acompañó al equipo pontevedrés, la familia Casado cree, como él hizo, en el Hai que roelo!.