El portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, ha negado "rotundamente" que el presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, haya sido objeto de chantaje con un vídeo en el que un empresario confesaba pagos al entonces tesorero del partido Álvaro Lapuerta.
Así se ha pronunciado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, preguntado por una conversación interceptada al expresidente madrileño Ignacio González que figura en la investigación de la operación Lezo y que ha publicado este viernes El Español.
Según este diario, en dicha conversación González explica al exministro Eduardo Zaplana como el presidente Rajoy recurrió a Luis Bárcenas para frenar la amenaza y pagar al empresario de la comunicación, Julio Ariza (Intereconomía), que en esos momentos controlaba la grabación. "Le soltaron pasta por la puta cinta. Para taparlo", mantiene González.
"A Rajoy no es fácil chantajearle ni se deja presionar"
Pero Méndez de Vigo ha rechazado las palabras de González, alegando que, quien conoce al líder del PP, sabe que no es fácil chantajearle ni "se deja presionar" de "esa manera". Además, ha apuntado que "no se puede hacer responsable a una persona de lo que digan otras" al mismo tiempo que ha reivindicado la presunción de inocencia.
Rajoy se ha puesto en contacto telefónico con Méndez de Vigo antes del comienzo de la rueda de prensa para que, en su nombre, el portavoz del Gobierno negase este chantaje, han asegurado fuentes gubernamentales.
De hecho, el propio Méndez de Vigo ha confirmado esta llamada de Rajoy, que se ha producido porque "intuía" que los periodistas iban a preguntarle por este asunto: "Rechaza profundamente que se haya producido un chantaje en estos términos", sostiene.
Además, el también ministro de Educación se ha referido a una conversación que, en teoría, le fue atribuida él, pero que "nunca" sucedió: "Después de todo, todo ha sido nada", ha apuntado, citando al poeta José Hierro, para así recalcar que "muchas de estas cosas" suelen acabar en "nada".
