Dos menores ratifican haber sufrido abusos sexuales por parte de la pareja de su madre

Las niñas explicaron que los supuestos abusos comenzaron cuando cumplieron ocho años. La Fiscalía solicita por estes hechos doce años de cárcel
El acusado de abusar sexualmente de dos menores, este martes en el juicio
photo_camera El acusado de abusar sexualmente de dos menores, este martes en el juicio

Las dos niñas menores de edad que denunciaron haber sido víctimas de abusos sexuales por parte del novio de su madre han ratificado este martes que sufrieron estos episodios desde que tenían ocho años.


En el juicio, celebrado en la Audiencia de Pontevedra, ambas declararon tras un biombo para preservar su intimidad y no cruzarse con el acusado, con quien su madre mantuvo una relación sentimental durante seis años y medio.

La más pequeña ha explicado que los supuestos abusos sexuales comenzaron cuando cumplió ocho años y, aunque al principio tan solo le agarraba de las manos y le daba besos en la boca, "cada vez fue a peor" y acabó obligándola a desnudarse, sometiéndola a tocamientos "de todo tipo", forzándola a tocarle también a él.

Los abusos se producían, según el relato de la niña, cuando se quedaban solos en casa o en el garaje y él le decía que "todo era un juego" y que "no se lo podía contar a nadie".

La menor acabó contándoselo a la orientadora de su colegio, según ha explicado, después de ver una noticia en la televisión de un caso de abusos de un padrastro a su hijastra y su madre acabó presentando denuncia en la Guardia Civil.

Su hermana, mayor que ella, también relató que sus abusos también comenzaron a los ocho años y, al igual que con la pequeña, empezó siendo "muy cariñoso" y poco a poco fue a más y abusaba de ella "siempre que no había nadie en casa", cuando "tenía la oportunidad", siendo la última de ellas "la más violenta".

El acusado mantuvo su inocencia y aseguró ante el tribunal que no sometió a las niñas a los tocamientos que ellas sostienen y que tan sólo les daba besos en la cara como parte de una relación "normal" en el que él actuaba como su padre y las cuidaba.

También ha negado que, tras romper la relación con la madre de las niñas, las hubiese llevado al piso de Pontevedra al que se fue a vivir, ya que tan solo "les compraba regalos" y seguía viéndose puntualmente con ellas.

Las niñas, sin embargo, durante su declaración detallaron las características de esa vivienda aportando todo tipo de datos sobre su distribución o incluso el color del sofá.

La Fiscalía solicita por estos hechos doce años de cárcel por sendos delitos de abusos sexuales y demanda a la Audiencia de Pontevedra que se le prohíba acercarse a las niñas durante un periodo de doce años y las indemnice con 6.000 euros a cada una.

El juicio continuará el jueves con la declaración de más testigos y las pruebas periciales. 

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