"Eu coñecíao por Pepe. Despois souben que era un narco, o Pelopincho"

Testigos de los acusados exponen coartadas y el jefe del Greco desvela que el patrón del barco confesó que llevaban 4.000 kilos de hachís
Uno de los acusados de nacionalidad marroquí llegando a la Audiencia
photo_camera Uno de los acusados de nacionalidad marroquí llegando a la Audiencia

El inspector Duarte, jefe del Greco Galicia, relató este jueves en la Audiencia Provincial que la participación en el intento de introducción en España de 4.000 kilos de hachís por parte de la banda de Pelopincho quedó acreditada en Portugal, donde ya fueron juzgados los hechos con la colaboración directa del patrón de la embarcación, el Garbi II, quien, sin embargo, cambió su discurso y dijo no recordar nada en Pontevedra. Las defensas de los investigados, por su parte, presentaron testigos con el objetivo de demostrar las supuestas actividades lícitas de los acusados e incluso de poner sobre la mesa una coartada.

Duarte explicó que López Núñez (el patrón) "quería colaborar desde el primer momento y así lo hizo constar, primero ante la Policía portuguesa y después a nosotros", y añadió que "relató su participación en los hechos, paso a paso". Resultó ser, pues, el hombre clave en la investigación, puesto que ofreció datos que ayudaron a dar con el resto de los investigados.

"Eu diso non sei nada". Dos amigos de Francisco Javier Tuñas, ‘Gelo’ o ‘Fran’, uno de los acusados de formar parte de la organización de narcotraficantes liderada por el desaparecido Pelopincho, declararon a continuación del investigador policial, señalando que desconocían los detalles del asunto que se estaba juzgando, nada menos que el intento de introducción en Galicia de 4.000 kilos de hachís. Uno fue compañero de trabajo del citado Tuñas, el otro de juergas, según sus propias palabras. Ambos quisieron dejar patente su desconocimiento sobre una parte de las actividades de su allegado (y del resto de investigados). Sin embargo, uno de ellos concretó con todo lujo de detalle las supuestas ocupaciones lícitas en el mundo del marisqueo. El segundo fue más allá al poner sobre la mesa una coartada para el encausado, asegurando que se encontraba "de fiesta" con él el día en el que, según la Policía, realizaba la travesía marítima entre África y Galicia que se rompió abruptamente frente a las costas portuguesas, en el naufragio que acabó con los arrestos de los narcotraficantes, la ¿pérdida? de la droga y la desaparación del ribeirense José Antonio Pouso Rivas, Pelopincho, y del pontevedrés José Bernardo Villaverde Amil, presuntos jefe y financiador de la operación de droga fallida.

El primero de los testigos señaló que Tuñas fue "compañeiro meu no marisqueo durante hai sete ou oito anos". Sobre el motivo que le llevó a participar en la compra de un barco (el Garbi II) que finalmente sería empleado para transportar droga, señaló que "estaba ilusionado porque quería buscar alternativas para cando fallaba o marisqueo. Quería marchar ao Sur para facer pesca deportiva". El individuo también declaró conocer a Pelopincho, pero sostuvo que en un principio "coñecíao por Pepe. Despois souben que era narcotraficante, o Pelopincho".

Sobre las ganancias en el marisqueo, relató que "a veces podía sacar 1.000 euros nun día", cifras que fueron puestas en tela de juicio por el fiscal Antidroga, Pablo Varela.

El segundo testigo fue más allá y presentó una coartada, señalando que es "veciño do concello" del investigado, y que le conoce "de ir de festa e pouco máis". Sin embargo, expuso con claridad que en el momento en el que, según el fiscal, el barco navegaba con la droga hacia Galicia, su amigo estaba con él en un hotel.

"Estivo comigo todo o día", concluyó.