Prosagal denuncia un "golpe de Estado" en la junta de personal del Chop

Siete sindicatos aprueban una moción de censura para rotar la presidencia del órgano de representación
Ferrero e Iñarrea, en rueda de prensa
photo_camera Ferrero e Iñarrea, en rueda de prensa

Tal y como estaba previsto, siete sindicatos forzaron este jueves el relevo de la directiva de la junta de personal del Chop, el máximo órgano de representación de los trabajadores del Complexo Hospitalario Universitario de Pontevedra. Los delegados de CESM-Omega, CIG, TSP, CSIF, Satse, UGT y CC OO acordaron con 18 votos a favor el cese de la presidenta de la junta, Carolina Iñarrea, y de su secretaria, María Ferrero. Ambas pertenecen a la Agrupación de Profesionales de la Salud de Galicia, Prosagal, el sindicato que recabó más apoyos en las elecciones celebradas hace casi dos años.

La presidencia ha quedado en manos de Carmen Revenga, del sindicato CESM-Omega, y la secretaría en manos de Xermán Rouco, de la CIG, aunque de forma provisional. La moción de censura lleva pareja el acuerdo de que ambos cargos sean rotativos entre las fuerzas de representación, cada cuatro meses. Revenga atribuyó el cese a una "medida democrática, que no es la primera vez que se adopta" en el Chop. Además, incidió en que la junta de personal es un "órgano colegiado" que adopta las decisiones como un conjunto y cuya presidencia se limita a "ejercer como una portavocía". El resto de precisiones las pospuso hasta celebrar el encuentro previsto con los trabajadores del Complexo.

Los siete votos en contra que emitieron los delegados de Prosagal no pudieron frenar el derribo, "un golpe de Estado sindical", según denunció Iñarrea minutos después. La hasta ahora presidenta de la junta subrayó que las centrales sindicales opositoras no justificaron la "pérdida de confianza" en la que fundamentaron la petición de cese y advirtió de que la convocatoria de la reunión vulnera la normativa en vigor. De hecho, adelantó que la agrupación adoptará "las medidas legales que consideren nuestros abogados". "Les dijimos que era un atentado, pero ni rebatieron ni argumentaron. Tenían prisa por cesarnos".

Iñarrea atribuye la moción a la transparencia con la que venía actuando Prosagal. "Les ha molestado que hagamos público que intentaban pactar permisos y licencias que perjudican a los trabajadores (...) o que solicitáramos la regulación de las comisiones de servicio (...) Ellos prefieren hacer los pactos en los despachos y cafeterías (..) a cambio de que el Sergas les mantuviese una ristra de derechos, subvenciones y dávidas. Una verdadera mafia", denunció. La portavoz también vinculó la reacción al hecho de que actuara sin estar liberada sindical, figura que existe en la práctica totalidad del resto de sindicatos.

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