Cerca de 2.000 peregrinos pasaron por la Boa Vila

El albergue que gestiona en la ciudad de Pontevedra la Asociación de Amigos do Camiño Portugués se quedó pequeño para acoger a los muchos peregrinos que pasaron por la capital del Lérez durante la recién terminada Semana Santa.

Según precisó este lunes el presidente del colectivo, Tino Lores, estos días pernoctaron en dichas instalaciones 420 personas, "lo que implica que en realidad recorrieron la ciudad cerca de 2.000 peregrinos, puesto que, teniendo en cuenta las estadísticas de la Oficina do Peregrino, la cifra de los caminantes que acuden al albergue se suele multiplicar por cuatro o por cinco para tener una idea de los que pasaron por la ciudad", dijo Lores.

Esto se debe a que el albergue cuenta con 56 plazas, por lo que en épocas de gran afluencia de peregrinos su capacidad no es suficiente y muchos caminantes tienen que buscar hoteles o pensiones.

De hecho, el presidente de la asociación explicó que el albergue estuvo completo desde el Domingo de Ramos e incluso hubo días que tuvieron que recurrir al pabellón del IES A Xunqueira I para acoger a grupos muy numerosos.

Tal y como aclaró Tino Lores, estos buenos resultados no son casualidad, sino que siguen la tendencia de los últimos años.

"En 2016 la Semana Santa había coincidido en marzo y entonces tuvimos a 781 peregrinos en el albergue. Esta tuvimos todavía más", incidió. "En 2017, desde el 1 de enero hasta el 31 de marzo llevamos contabilizados 818 y calculamos que este mes sumaremos otros mil o más".

En cuanto a la procedencia, la mayoría de los caminantes hacia Santiago llegaron desde otros puntos de España y desde Portugal, si bien hubo visitantes de muy diversas nacionalidades.

"Tenemos peregrinos desde los dos años de edad a los 80, pero la mayoría de la gente que viene tiene entre 30 y 60 años", aclaró Tino Lores, quien destacó que "el Camiño Portugués crece año a año. Es algo imparable".