Un pontevedrés encuentra unas esposas y tiene que pedir ayuda a la Policía Local para liberarse

Los agentes de la Jefatura de la Policía Local de Pontevedra que se encontraban de servicio durante la madrugada del lunes al martes se encontraron ante una situación de lo más curiosa, al recibir la visita de un individuo que ‘lucía’ unas esposas reglamentarias puestas, pidiendo ayuda para poder liberarse. El testimonio del joven de 38 años (que acudió a las dependencias policiales en compañía de una mujer de 37) parecía del todo inverosímil, aunque finalmente fue dado por bueno por los agentes.

El hombre explicó que se encontraba paseando al perro con su pareja por la zona de A Xunqueira, a la altura del Campus Universitario, cuando se encontró con unas esposas que llamaron su atención. Eran las cinco de la madrugada, lo que hizo sospechar, en un principio, de que podría tratarse de un convicto.

Sin embargo, lejos de ser así, parece que el individuo decía la verdad. De hecho, su primera idea (después de verse inmovilizado tras emplear las esposas como si fuesen un juguete) fue la de acercarse a un vigilante de seguridad el Campus Universitario para ver si las esposas eran suyas y podría ayudarle a liberarse, algo que no ocurrió.

Acto seguido se dirigieron a las dependencias de la Jefatura de la Policía Local, donde sí pudieron ayudarle. Los investigadores mantuvieron las distancias y no liberaron al ciudadano hasta que tuvieron el total convencimiento de que la historia que estaba contando era cierta, dada la hora que era (más de las seis de la madrugada) y lo extraño de la situación, que nunca antes se había producido en la sede de los agentes municipales de la ciudad.