PP y PSOE aumentan la presión hacia Marea tras el pacto fallido con el BNG

El pacto de gobierno fallido entre BNG y Marea sigue generando turbulencias en el seno de la oposición. Así se puso de manifiesto en el Pleno municipal de este lunes, en el que tanto PP como PSOE aumentaron la presión hacia la coalición de izquierdas que lidera Luís Rei, a quien cuestionan su falta de independencia a la hora de fiscalizar la labor del Ejecutivo de Miguel Anxo Fernández Lores.

"A nova situación de Marea fai complicado facer propostas solventes. Trátase de non molestar ós pseudosocios do Goberno. E trátase de apoiar uns orzamentos que só asinaría Donald Trump", dijo el portavoz socialista, Agustín Fernández.  La alusión al presidente de Estados Unidos no fue casualidad. En la negociación de los Presupuestos de 2017, Rei comparó las cuentas del Bloque con las que haría el magnate republicano. La hemeroteca le persigue desde entonces y así se lo recordó también el grupo del Partido Popular. "Asinan os Orzamentos de Donald Trump, non fan nada coa prórroga do lixo e da auga... Están vostedes descoñecidos, señores da Marea de Podemos", le espetó su portavoz, Jacobo Moreira.

El rifirrafe se producía en plena discusión de una moción de Marea que proponía que el Hospital Provincial mantuviese la actividad sanitaria y la gestión pública tras la ampliación de Montecelo. La iniciativa, apoyada por el PSOE, acabó siendo rechazada. Y todo por una cuestión semántica. El Gobierno local (BNG) no estaba dispuesto a que se obviase el uso sociosanitario del centro, en el que la Xunta proyecta una residencia de mayores.

En este contexto, y fuera de la discusión de la propuesta, continuaron los ataques cruzados entre PP y Marea. Los primeros recordaron la pelea del fin de semana en el congreso de Anova, formación que apoya a esta organización política, y lo compararon con "un ring de loita libre". Y los segundos recomendaron al partido de derechas que celebrase sus convenciones cerca de "institucións penitenciarias".

El debate político se tensó también con una iniciativa del PP en favor de la conciliación, que no salió adelante y que llevó a la edil de Benestar Social, Carmen Fouces (BNG), a acusar a la formación de "banalizar" la igualdad, de ejercer de "mamporreiro" de la Xunta y presentar "mocións chorras", ya que sobre el contenido de la misma ya hay un compromiso del Gobierno gallego. 

La sesión plenaria dejó otras dos situaciones de conflicto. La primera tuvo que ver con la ausencia de dos ediles del PP, que evitó el reproche al BNG por la prórroga del contrato del agua y el posible "sobrecuste" del servicio. El voto de calidad del alcalde frenó otra moción -del PSOE- crítica con el estado del barrio de Mollavao.