El Marín Ence Peixegalego luchó con honor y salió de la trinchera para combatir con el poderoso Palencia. Conservó el honor en su lucha, pero no la vida. El conjunto marinense encadenó su sexta derrota ante un rival con muchos más recursos, vigente campeón de la competición y que en la vigente temporada está involucrado en la lucha por el título.
El cuadro de Javi Llorente estuvo siempre a merced de su adversario, adoleció de falta de concentración e intensidad en algunas fases del duelo, particularmente bajo su tablero, y además presentó unos porcentajes de tiro exterior muy alejados de los que le permitirían tener alguna opción remota de vencer a un gigante como al que recibió este sábado.
Ante tales argumentos, volvió a aparecer la heroica para ofrecer a la afición de A Raña un partido perdido con decoro, por diez puntos y peleando hasta el final. El resultado, en cambio, no manifestó la diferencia real entre los dos bloques, puesto que el cuadro visitante, amparado en la dirección magistral de Dani Rodríguez y en el peso y acierto de sus jugadores interiores, siempre controló el duelo.
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