El padre de Idoia: "Dicen que el tiempo lo borra todo. Es mentira"

El padre de la cabo de Friol y miembro de la Brilat de Pontevedra fallecida en un atentado en Afganistán ha participado en los actos en homenaje a la joven

El padre de la cabo de Friol, en Lugo, Idoia Rodríguez Buján, Constantino Rodríguez, fallecida hace diez años en un atentado contra un convoy militar español que participaba en un misión en Afganistán, ha afirmado que es "mentira" que el "tiempo lo cura todo". Así se ha manifestado coincidiendo con al jornada en la que Friol recuerda a su vecina fallecida en 2007 con distintos actos en la Plaza Rosalía de Castro de este municipio lucense. En el acto, ha acompañado a la familia el acalde de Friol, José Angel Santos, el jefe de la Fuerza Logística Operativa y representante institucional de las Fuerzas Armadas, Francisco Javier Sánchez Fernández, y el coronel jefe de la comandancia de la Guardia Civil de Lugo, Miguel Angel González Arias, entre otros.

Idoia Rodríguez Buján, que tenía 23 años, fue la primera militar española fallecida en una misión en el extranjero, tras la explosión de una mina al paso de la columna española. El padre de la militar fallecida ha afirmado que la familia sigue "bastante fastidiada" y ha sostenido que el recuerdo pesa "prácticamente como el mismo día" en que fallecía su hija. "Dicen que el tiempo lo borra todo. Eso es mentira", ha confesado. Con respecto al Gobierno central "de aquella", ha recordado el padre de Idoia que se portó de "maravilla con la familia". "Mejor imposible", ha sentenciado.

En la localidad luguesa de Friol un monolito recuerda a la militar lucense fallecida, al igual que en Pontevedra, según ha destacado Constantino Rodríguez. En este acto de este miércoles se ha dado lectura a la efemérides y se ha homenajeado a los que dieron su vida por España. Además, familiares de la homenajeada han ofrendado una corona de laurel.

ATENTADO. El 21 de febrero de 2007 Idoia Rodríguez Buján falleció y otros dos militares españoles resultaron heridos en un atentado contra un convoy de vehículos en las inmediaciones de Shindand, una localidad en la zona asignada a las tropas españolas en Afganistán en aquel momento. Los tres soldados afectados viajaban en una ambulancia blindada (BMR) dentro de un convoy formado por otros cuatro BMR que realizaban una misión de apoyo a los equipos italianos (OMLT) que instruían al Ejército afgano.

El suceso ocurrió pasadas las 12.00 horas de ese 21 de febrero de hace diez años cuando la ambulancia circulaba en cuarto lugar. En su interior viajaba el equipo médico compuesto por una teniente médico, un alferez ATS, una soldado conductor y un cabo. La fallecida en el atentado a causa de las heridas provocadas por la explosión de un artefacto fue la soldado Idoia Rodríguez Buján, natural de Friol de 23 años, y que pertenecía al Regimiento de Infantería Ligera Aerotransportable de la Brilat de Pontevedra.

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