Pontevedra dispone de las mayores reservas de agua de Galicia pese a la sequía

O Pontillón es el embalse con el mejor nivel de Galicia al rozar el 95% de ocupación, muy similar al que registra durante el invierno ► El Concello garantiza el abastecimiento a la ciudad a través del Lérez
El nivel del Lérez en la estación de bombeo llegó este lunes a los 2,57 metros
photo_camera El nivel del Lérez en la estación de bombeo llegó este lunes a los 2,57 metros

El verano afronta su recta final con una evidencia: la escasez de lluvias. "Foi bastante seco", comentan los expertos de MeteoGalicia, que recuerdan que Pontevedra registró este año el mes de julio más seco de las últimas dos décadas. "Choveu un 90% menos do normal", señalan. El avance del informe climatológico de agosto revela que las precipitaciones de este mes también fueron escasas, un 56% menos de lo habitual, pero lejos de las marcas de ejercicios anteriores como 2010 o 2013. Entonces, el índice de lluvias fue un 80% menor de lo común.

A pesar de este panorama y de las elevadas temperaturas registradas en las Rías Baixas durante el período estival, Pontevedra es inmune a la sequía. Así lo pone de manifiesto el boletín hidrológico de la Xunta, del que se desprende que O Pontillón do Castro es el embalse de Galicia con mayores reservas de agua según su capacidad.

La presa pontevedresa dispone de un porcentaje de ocupación cercano al 95%, un valor similar al que suele registrar durante el invierno, cuando la probabilidad de chubascos es mayor. O Pontillón, cuyo nivel se situó en el 94,53% el pasado 29 de agosto, superó la marca de las 18 presas que existen en la comunidad. A algunas de ellas, como la de Fervenza (en el Xallas), casi las duplicó.

La buena salud hidrológica garantizaría el suministro de agua de la ciudad y de los municipios de la ría en caso de que la seca se mantenga. Aún así, el Concello no se plantea echar mano de O Pontillón a corto plazo. ¿Por qué? Porque los recursos hídricos del Lérez son suficientes como para atender la demanda de la población.

Según datos recogidos por el Gobierno local, el nivel del río llegó este lunes a los 2,57 metros, una medida considerable si se tiene en cuenta que Pontevedra solo acude a las reservas de su embalse, situado en la parroquia de Verducido y conectado con el río Rons, si la profundidad del Lérez baja de un metro.

EL PROTOCOLO. En caso de que la falta de lluvia se mantuviese y peligrase el abastecimiento de agua a la ciudadanía, el protocolo municipal tiene fijada una única prioridad: el consumo doméstico.

El plan de ahorro hídrico de Pontevedra contempla, siempre en este escenario extremo, la supresión del baldeo por parte del servicio de limpieza viaria del Concello, una medida que se ha llevado a cabo en otras ocasiones y que implica el ahorro de más de 240.000 litros al día. La última de ellas tuvo lugar en octubre de 2011 como consecuencia de la escasez de lluvia debido a un otoño atípico.

Otra de las medidas previstas es la reducción o supresión del consumo de agua por parte de las industrias. Una de las empresas que se vería afectada por este escenario sería Ence, que, pese a haber reducido considerablemente las captaciones del río Lérez, precisa una importante cantidad de agua para garantizar su actividad: la producción de pasta de papel libre de cloro.

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