El sindicato UGT ha pedido a los Ayuntamientos y a la Diputación de Pontevedra que adopten una postura "contundente" con aquellas empresas del sector turístico que tengan denuncias por incumplimiento de contrato laboral y que no autoricen el montaje de terrazas a los hosteleros en esta situación.
El secretario de UGT Pontevedra-Arousa, José Ramón Vidal y el delegado de la Federación de Comercio de este sindicato, Carlos Esperón, han indicado que se han incrementado las contrataciones durante este verano en empresas de hostelería y, en general, en el sector terciario, pero también apuntan que "han aumentado las irregularidades en los pagos".
Vidal ha señalado que muchos de los profesionales de la hostelería formados deciden emigrar ante la situación empresarial que se vive en Galicia
Ante esta situación, desde el sindicato se reclama que los ayuntamientos no autoricen la instalación de veladores o dejen de conceder beneficios a aquellos establecimientos en los que existan denuncias. Entienden que todas las administraciones deben actuar para evitar una situación de "competencia desleal" que se está registrando en el sector, según Vidal y Esperón, ya que coinciden establecimientos que no realizan contrataciones correctas con otros que sí.
José Ramón Vidal ha recordado que mantuvieron a principios del verano un encuentro con el jefe de la Inspección de Trabajo en Pontevedra para trasladarle la preocupación por este tema. Desde la Inspección reconocieron el problema y señalaron que pondrían en marcha un programa de control que, sin embargo, "no está obteniendo resultados", según este sindicato, "por carencia de medios".
Afirman que el perfil del trabajador que se encuentra en una situación de impago de todo el salario establecido en el convenio del sector hostelero es el de "mujer joven con nóminas de 700 euros", cuando tendrían que estar cobrando 1.000 euros por el tiempo que excede de su jornada laboral.
CONDICIONES INFERIORES. En el 90% de los casos indican que los trabajadores llegan al sindicato después de haber firmado el finiquito sin ser conscientes de haber aceptado una cantidad económica inferior a la que les corresponde en las que, según los representantes sindicales, "no suelen abonarles las vacaciones o las horas extra".
Vidal ha señalado que muchos de los profesionales de la hostelería formados en centros como el Carlos Oroza de Pontevedra deciden emigrar ante la situación empresarial que se vive en Galicia y ha reclamado una intervención por parte de las distintas administraciones para limitar estos abusos por parte de los empresarios.
