El Pontevedra Club de Fútbol cerró la temporada en sus categorías base la pasada semana con la final de la lucha por el ascenso a Liga Gallega cadete del Club Deportivo Lérez, el filial del club en categorías de formación.
El conjunto granate no pudo poner el broche de oro a una temporada que los responsables técnicos catalogaron de muy positiva y no pudo superar a doble partido al Salgueiriños, por lo que se quedó a las puertas del ascenso a Liga Gallega cadete, después de haber obtenido el subcampeonato de Liga en la temporada regular y de haber superado una primera ronda por el salto de categoría.
A pesar de ello, y de las decepciones del equipo juvenil de División de Honor y del filial, que compitieron respectivamente en Liga Nacional y en Primera Autonómica, el balance realizado por el responsable del área deportiva del club, Roberto Feáns, y por el director de la base de la campaña 2015-16, Pedro Ferreira Iglesias, fue muy favorable.
El club afrontaba el ejercicio después de haber sufrido siete descensos en la campaña precedente. Su objetivo era reconstruir las estructuras deportivas de los equipos, recomponer algunos de ellos a nivel de futbolistas, mejorar el servicio a los deportistas y su formación y obtener los mejores resultados por categorías para facilitar la evolución y progresión de los deportistas.
Logradas las metas cualitativas, en el apartado de resultados el club recuperó parte del terreno perdido durante el curso anterior con la celebración de tres ascensos. El equipo infantil A subió a Liga Gallega, lo que permitió que el segundo equipo del club pudiese materializar el ascenso que también logró y que lo llevó a dar el salto a Primera infantil.
Los dos equipos infantiles consiguieron subir a Liga Gallega y Primera Infantil y el benjamín también subió a la máxima categoría
El conjunto benjamín A, además, obtuvo el ascenso al dominar con autoridad su competición y el año que viene podrá competir en Primera.
Además, la entidad estuvo a punto de celebrar otro salto de categoría. El Club Deportivo Lérez, que actuaba en Liga Gallega juvenil, logró el subcampeonato y cumplió con sus expectativas. Ese resultado le permitiría jugar el año próximo en la segunda división, la Liga Nacional. Sin embargo, el primer equipo, que militaba precisamente en esa competición, no pudo culminar su objetivo, a pesar de que estuvo más de la mitad de la temporada en puestos de honor, hasta con seis puntos de margen con respecto a sus perseguidores en la batalla por el ascenso a División de Honor.
Al no subir el primer equipo, tampoco lo pudo hacer el CD Lérez, ya que ambos conjuntos, vinculados a un mismo club por acuerdos de filialidad, no pueden competir en una misma categoría.
FILIAL. A pesar de las dificultades que padeció en muchas fases del campeonato, el Pontevedra B, que militaba en Primera Autonómica, fue capaz de conservar la categoría, aunque se quedó lejos de los primeros puestos.
El club reaccionó a tiempo en la segunda vuelta para permitir al cuadro dirigido por Antonio Lodeiro mantener la categoría.
El objetivo del PCF para el próximo ejercicio es consolidar las estructuras y el trabajo de este curso e intentar tener a sus conjuntos en las categorías de mayor nivel.
Los dos equipos infantiles consiguieron subir a Liga Gallega y Primera Infantil y el benjamín también subió a la máxima categoría
