Ases del deporte con mensaje de protesta

Alumnos, padres y profesores del CEIP Cruceiro volvieron a aprovechar la celebración del Entroido para exigir la construcción del nuevo colegio de O Revel
Tal y como viene siendo habitual desde 2011, los pequeños, acompañados por familiares y maestros, iniciaron la marcha en el colegio de Vilalonga y se desplazaron a la explanada en la que se construirá el nuevo centro educativo
photo_camera Tal y como viene siendo habitual desde 2011, los pequeños, acompañados por familiares y maestros, iniciaron la marcha en el colegio de Vilalonga y se desplazaron a la explanada en la que se construirá el nuevo centro educativo

El ingenio de la comunidad escolar del CEIP Cruceiro no deja de sorprender. Los años pasan y el proyecto del nuevo colegio sigue sin experimentar avances, lo que provoca que, desde el año 2011, cada desfile de Carnaval sea toda una declaración de intenciones. Por quinta edición consecutiva, el festival de Entroido del centro educativo de Vilalonga sirvió para que alumnos, padres y profesores dejasen claro que no se han olvidado de la futura escuela.

En esta ocasión, los pequeños se inspiraron en los ases del deporte para realizar su particular protesta. La pancarta que lució la comitiva durante el desfile, que llevó a los participantes desde el CEIP O Cruceiro hasta O Revel, lucía un mensaje elocuente: ‘Pasan de nós olimpicamente’, en clara referencia a los responsables de la actuación.

Durante una hora, los estudiantes tomaron las calles del núcleo de la parroquia para lucir sus disfraces de deportistas. Jugadores de baloncesto, futbolistas, tenistas, taekwondistas y levantadores de pesas lucían orgullosos sus uniformes. A pesar de que el proceso burocrático previo al desarrollo de las obras todavía se encuentra estancado (la Consellería de Educación aún no dispone de los terrenos necesarios para acometer los trabajos), la marcha estuvo marcada por las risas, la música y el buen ambiente.

La comunidad del CEIP Cruceiro no pierde la esperanza de que en el futuro pueda celebrar el Carnaval sin necesidad de pensar en mensajes reivindicativos.

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