Ponte Caldelas llegará a ahorrar 140.000 euros al traspasar la Edar, pero peligra un empleo

El Concello cede a la Xunta el mantenimiento y pide que no se despida al operario de la depuradora, pues la nueva empresa no quiere asumirlo
El alcalde (derecha) este martes con el representante de la Xunta, el trabajador y los miembros de la CIG
photo_camera El alcalde (derecha) este martes con el representante de la Xunta, el trabajador y los miembros de la CIG

La jornada destinada por el Gobierno local de Ponte Caldelas a la firma del convenio de traspaso del mantenimiento de la Edar acabó tomando un cariz sindical, al descubrirse en el mismo que el único trabajador adscrito a estas instalaciones podría perder su puesto en virtud a este cambio.

El alcalde de Ponte Caldelas, Andrés Díaz, acudió este martes al acto de rúbrica del convenio en las propias instalaciones, con la intención de formalizar por fin una cesión que supondrá un ahorro de 140.000 euros de los 200.000 que el Concello destina al año a mantener el saneamiento de todo el concello. Sin embargo, lo que no esperaba el regidor era que el único trabajador de la instalación viese peligrar su puesto. Hasta el momento, su contrato estaba vigente con la empresa Viaqua, a la que el Concello tenía subcontratado el mantenimiento. Sin embargo, al pasar a depender de la Xunta será otra firma, Extraco, la que asuma esta labor. Viaqua comunicó al trabajador, que lleva, según dice, 27 años prestando servicio en Ponte Caldelas, la rescisión de su contrato, mientras que Extraco no considera que deba asumir dicho empleo.

El alcalde, que explicó que desconocía la situación, puesto que las condiciones del convenio ya fueron pactadas por el anterior regidor, mostró su apoyo al trabajador y adelantó que se estudiará el caso para enviar a la Xunta un escrito solicitando que no se destruya el empleo.

Al lugar también acudieron representantes sindicales de la CIG que informaron de que se iniciarán acciones legales para defender los derechos legítimos del afectado.

El traspaso del mantenimiento de la Edar de Ponte Caldelas forma parte del proceso puesto en marcha por la Xunta para asumir esta tarea en todo el territorio gallego y que se inició en paralelo con el cobro del conocido como canon del agua. En Ponte Caldelas se recaudan al año 27.000 euros por saneamiento, lo que da una idea de lo deficitario que es este servicio. Con respecto al canon del agua, no habrá cambios en las facturas a los vecinos, pues en el municipio se aplica el coeficiente de vertido desde el año 2013.

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