«Al final del verano la gente quiere retomar la rutina de siempre». Así se relata desde los gimnasios de Pontevedra el ingreso de sus nuevos clientes después del verano. La vuelta al trabajo viene acompañada de la búsqueda de algún momento para desconectar y una de las alternativas más solicitadas es apuntarse a un centro deportivo. Otra cosa es cuánto se aguante.
«Ha venido mucha gente a pedir información», explica la encargada del gimnasio Odisea, que confirma que muchos de ellos más tarde terminan por anotarse en las diferentes actividades que se imparten. «La mayoría de la gente que se apunta en verano logra continuar varios meses, no lo dejan tantos como se suele decir», confirman desde Odisea, uno de los gimnasios con más socios superando el medio millar. Durante todo el año se premia con descuentos que los clientes abonen por anticipado las cuotas, además de los clásicos packs de varios meses.
Otro de los gimnasios de referencia en la ciudad del Lérez es el Budo, que también cuenta con piscinas, algo muy solicitado durante el mes de agosto debido al mal tiempo. «Al final de agosto comenzó a venir mucha gente solicitando información y tarifas», comenta el responsable del local, que recibe un gran número de peticiones de padres que quieren apuntar a sus hijos a natación a la vez que ellos van al gimnasio. El aumento de interesados «es mayor que en otras épocas del año».
En otros espacios adaptados para la práctica de diferentes deportes se ha notado que este verano, a diferencia de otros, el número de abonados no disminuyó tanto como años pasados. El motivo, creen, «se debe a que la gente no puede ir de vacaciones a otros lugares, se queda en Pontevedra y viene a desconectar aquí entre semana», se apunta desde otro de los centros de referencia.
La oferta además es cada vez más amplia. Con el fin de diferenciarse de otros espacios, los gimnasios imparten cursos de deportes diferentes a los que tradicionalmente se han practicado. A diferencia de años atrás, se comienza también a hacer descuentos por cada miembro de la familia que se anote a alguna actividad, algo que se complementa con la diversidad de ejercicios que se dan.
Las actividades dirigidas son las más solicitadas. Tienen como elemento especial la presencia de un monitor que coordina el ejercicio, algo que ayuda bastante a no perder el ritmo ni a entretenerse. Las artes marciales o el spinning son de las más buscadas, frecuentadas por muchas personas que practican deportes de exterior que quieren mantener la forma en días de lluvia y frío en los que se hace imposible la realización de estos.
Otro de los sitios más requeridos son los especializados en algún deporte en particular, algo que en muchos casos influye en las clases, impartidas por monitores con un conocimiento más específico. Life Style es un centro dedicado a pilates y yoga. «Se nota el repunte, es algo que pasa todos los años. El número de personas que se apuntan después del verano es mucho más que las que lo hacen después de Navidad», afirma el encargado del espacio, que explica que la gente que no suele buscar planes específicos sino comenzar «nuevos hábitos y con ellos ir marcado la rutina del nuevo curso».
En los últimos años, coinciden todos en que hay más gente en los gimnasios, muchos intentando adelgazar. «La gente se cuida mucho más», añade el encargado de Life Style, que nota como sus clientes, debido a la crisis económica, «tienen una mayor conciencia de vida saludable, mucho más que hace unos años».
