La casa rectoral que se convirtió en hogar

Cáritas Interparroquial de Ponte Caldelas hizo el domingo efectiva la cesión durante los tres próximos años de un inmueble a una familia de la villa, compuesta por un matrimonio y dos niños, que carece de recursos económicos
El arzobispo de Santiago de Comopstela, Julián Barro, no dudó en desplazarse hasta Caritel para dar su bendición al nuevo hogar.
photo_camera El arzobispo de Santiago de Comopstela, Julián Barro, no dudó en desplazarse hasta Caritel para dar su bendición al nuevo hogar.

El arzobispo de Santiago de Compostela, Julián Barrio, bendijo ayer domingo la conocida como Casa Rectoral de Caritel, que ha sido cedida a una familia de Ponte Caldelas que está pasando por un momento delicado en el aspecto económico, como consecuencia de la crisis. Los nuevos inquilinos de la vivienda podrán habitar en ella durante los próximos tres años.

La casa fue cedida a Cáritas Interparroquial Ponte Caldelas, que gestiona, a su vez, la relación con los inquilinos, que serán la pareja compuesta por Tomás y Esther y sus dos niños. Esta familia residía hasta ahora en A Pousa, pero no encuentra soluciones sencillas, debido a la ausencia de expectativas laborales. Vivir en esta casa les ayudará a mantener a los niños escolarizados cerca y a perpetuar su búsqueda de empleo.

PUESTA A PUNTO. Para poner la vivienda a punto, el propio Tomás invirtió cuatro meses en las reparaciones. Para ello contó con la ayuda de Cáritas y del Concello de Ponte Caldelas, que aportó los materiales y la mano de obra necesaria para los trabajos. La residencia tiene unos 70 años de antigüedad aproximadamente y llevaba más de un lustro sin ser habitada, por lo que fue necesario renovar el encalamiento de las paredes, pintarlas, colocar nuevo cableado, arreglar la fontanería y dotarla de cocina de hierro y calefacción. Esta última aportación también proviene de Cáritas Interparroquial. Con el trabajo de Tomás, que actualmente busca empleo y que cuenta con experiencia en el mundo de la construcción, se volcó a la hora hacer realidad las reformas necesarias, la vivienda quedó habitable y en condiciones óptimas para ser aprovechada en el futuro, más allá de estos tres años.

La Administración municipal colaboró en la rehabilitación del inmueble aportando material y mano de obra

Por su parte, la Iglesia dio su visto bueno al proyecto a condición de que se ceda un espacio a actividades parroquiales. De esta manera, una de las salas de la casa, la más grande, se destinará a reuniones de Cáritas, de la propia parroquia o a lo que los responsables religiosos consideren necesario.

Los nuevos inqulinos del remodelado inmueble expresaron su gratitud tanto hacia el Ayuntamiento como hacia el colectivo social por su implicación y colaboración a la hora de hacer realidad este proyecto. ''La verdad es que no podemos estar más agradecidos a Cáritas y al Concello de Ponte Caldelaspor la ayuda que hemos tenido''. El padre de familia reconoció que la situación por la que está atravesando su familia a ''es muy complicada'', por lo que ''no tener que hacer frente a pagos de alquiler durante los próximos tres años puede significar el paso definitivo para ponernos en marcha de nuevo'', indicó.

CASA DE LOS REALOJOS. Cabe recordar que la Administración municipal de Ponte Caldelas dispone en la actualidad de una casa social en la propia localidad de Caritel. Se trata de la famosa casa destinada en su día a acoger realojos. No obstante, la necesidad de cumplir con unos criterios estrictos impide que familias como esta puedan aprovecharla.

En todo caso, el Gobierno local informa de que mantiene a día de hoy abierta la convocatoria de solicitudes.

Comentarios