La provincia coruñesa deja atrás a la de Pontevedra en el tráfico de cruceristas

Vigo perdió un 6,49% de pasajeros en el primer semestre del año, mientras el puerto herculino ganó un 57,48% ► Marín espera subirse al carro de los cruceros con la llegada de uno de lujo prevista para octubre
Un crucero atracado en el puerto vigués
photo_camera Un crucero atracado en el puerto vigués

El turismo de cruceros está en auge y, de hecho, el tráfico de pasajeros de este tipo de barcos de recreo ha vuelto a establecer un nuevo récord histórico en los puertos españoles durante el primer semestre de este año. A pesar de las buenas cifras, el de Vigo ha perdido fuelle, mientras que el de A Coruña ha registrado un notable incremento.

Según los datos facilitados por el Ministerio de Fomento, el puerto de la ciudad olívica recibió entre enero y junio a 71.028 pasajeros, es decir, un 6,49% menos que en el mismo período del año pasado.

El herculino, sin embargo, registró a 74.762, lo que supone un 57,48% más, dejando a la provincia pontevedresa bastante por detrás en el ranking. De hecho, además de los buques turísticos que arriban a la rada coruñesa, hay que tener en cuenta los que hacen parada en Ferrol-San Cibrao, que en los primeros seis meses de este año contabilizó a 6.504 cruceristas (un 5,85% menos que en las mismas fechas de 2016).

Con todo, se trata de un mercado que continúa en aumento. Según los últimos datos ofrecidos por la Asociación Internacional de Líneas de Crucero (CLIA Europa), España continúa siendo el segundo país europeo que más pasajeros recibió, sólo por detrás de Italia. En concreto, 5,93 millones de cruceristas hicieron escala en puertos nacionales. También ocupa la segunda posición como país de embarque, con 1,28 millones de pasajeros. Desde 2014 se mantiene un ritmo de crecimiento del 4%, que ha permitido pasar de los 454.000 españoles que habían escogido esta opción para hacer turismo aquel año a los 486.000 en el último ejercicio. Esa cifra posiciona a España como el quinto país de Europa en emisión de cruceristas, aunque muy por detrás de Alemania y Reino Unido-Irlanda, que encabezan el ranking con 2 y 1,88 millones de personas, respectivamente, y acercándose a países como Italia y Francia.

Los puertos del Atlántico peninsular y del Cantábrico aglutinan ya casi el diez por ciento del total nacional de cruceros

Con más de 1.300 millones de euros de contribución económica directa, España se mantiene como el cuarto mercado europeo que más se beneficia del sector de los cruceros. Asimismo, esta industria generó en el país un total de 28.600 empleos.

MÁS CERCA. En este contexto, el puerto de Marín también espera sacar partido de este tipo de buques, algo que la Autoridad Portuaria lleva años estudiando y que próximamente se materializará con la llegada de un gran crucero turístico. Para el 8 de octubre está prevista la llegada del Ms Bremen, de la naviera alemana Hapag-Lloyd Cruises, una nave de lujo con capacidad para 155 pasajeros ofertada como Crucero musical, que partirá del puerto de Hamburgo el 30 de septiembre y realizará un recorrido por la costa occidental europea con destino a Lisboa. El recorrido incluye escales en Bélgica, Gran Bretaña, Francia, Portugal y en dos puntos de Galicia: Celeiro (Viveiro) y Marín.

Este será el primer crucero de envergadura que arribe al puerto marinense, lo que ha reavivado el viejo deseo de captar líneas regulares y de que este se convierta en escala habitual, lo que proporcionaría posibilidades económicas muy interesantes tanto en el municipio como en la ciudad capitalina y en los ayuntamientos de los alrededores, al igual que sucede ya en Vigo, A Coruña y Ferrol.

El Concello de Pontevedra desarrolló hace años diferentes campañas promocionales para atraer a los cruceristas que llegan a la provincia por el puerto olívico, pero esta nueva posibilidad facilitaría mucho ese propósito.

Entidades empresariales y comerciales han expresado su satisfacción por la futura llegada del Ms Bremen y reiterado su petición para que las administraciones apuesten por esta vía. No es de extrañar, teniendo en cuenta que un análisis realizado por la Universidade de Vigo señaló que cada pasajero en tránsito por el puerto vigués en el año 2010 gastó una media de 62 euros en tierra, una cantidad que ascendió a 95 euros en el caso de los barcos con origen o destino en dicha urbe, y que cada miembro de la tripulación desembolsó una media de 40 euros.

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