Raquel Rascado (vecina): "A mí me sale más rentable coger el autobús para ir a trabajar a Marín"

La materia pendiente de la comarca sigue siendo el transporte metropolitano

Las carencias del servicio motivan que la mayoría de los desplazamientos se hagan en coche
Un grupo de usuarios, a punto de subirse a un autobús en la estación de Pontevedra
photo_camera Un grupo de usuarios, a punto de subirse a un autobús en la estación de Pontevedra

La aprobación de los Presupuestos municipales de Pontevedra, impulsada por el BNG y la abstención de En Marea a principios del pasado mes de abril, sirvió, entre otras cosas, para dar por buena una partida de 205.000 euros que se destinará a hacer realidad el ansiado transporte metropolitano.

A día de hoy, la carencia de este servicio sigue pasando factura a miles de vecinos de diferentes municipios que, en muchas ocasiones, optan por utilizar sus vehículos particulares, en vista del déficit de conexiones en autobús. La mejora de esta prestación ha sido demandada en varias ocasiones no solo por los usuarios, sino también por los propios concellos. Hace unos meses, el regidor de Poio, Luciano Sobral, recordaba los problemas que padece "un veciño de San Xoán ou San Salvador de Poio para poder chegar ao Complexo Hospitalario de Pontevedra. Non é de recibo". A nadie se le escapa que buena parte de las ciudades más importantes de Galicia ya cuentan en la actualidad con una red de conexiones de autobús con precios y frecuencias más que aceptables, algo que, de momento, no sucede aquí.

Pero los problemas no solo se generan a la hora de trasladarse desde municipios vecinos a la capital de la provincia. Cuando el trayecto es a la inversa, las quejas son similares. Por ejemplo, la Asociación de Veciños de Portonovo, en Sanxenxo, llegó a presentar varios escritos en su día para exigir una mayor frecuencia de viajes desde Pontevedra hasta la villa turística de la comarca de O Salnés.

No obstante, también hay excepciones. Por ejemplo, la línea entre la capital del Lérez y Marín cumple, de momento, con las expectativas de los usuarios. Así lo cree Raquel Rascado, una joven pontevedresa que recientemente ha encontrado trabajo en la localidad de la península de O Morrazo, a donde se traslada diariamente en autobús.

PRECIO EXCESIVO. "Es la única línea de la provincia que está bien comunicada. Hay mucha frecuencia de horarios y desde muy temprano hasta muy tarde", señala la vecina de Pontevedra. Lo que sí le parece criticable es el precio, que asciende a 1,40 euros por viaje, reducido a un euro en caso de tener bono. "Es mucho dinero para un trayecto tan corto", sentencia.

Con la puesta en marcha del transporte metropolitano, además de actualizar las frecuencias, también se apostaría por una unificación de precios, lo que redundaría en el bolsillo de los usuarios.

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