Poco a poco, el Camiño da Granxa va luciendo el aspecto que buena parte de los vecinos del lugar, situado en la parroquia de Raxó, muy cerca de la frontera con el municipio vecino de Sanxenxo, llevan demandando desde hace tiempo.
Los trabajos llevados a cabo a lo largo de las últimas semanas por los operarios responsables de la obra han provocado una importante mejora en el vial, que desde hace unos días luce nueva pavimentación. Asimismo, también se ha ampliado de forma notable el espacio en algunos de sus tramos. Precisamente, esta era una de las demandas principales de algunos residentes, que en más de una ocasión advirtieron de que la estrechez del camino dificultaba el tránsito de turismos y, además, imposibilitaba el acceso de vehículos que prestan servicios básicos. Este problema quedó patente hace poco más de un año, cuando una ambulancia se quedó atascada en mitad del vial cuando acudía a la zona para prestar auxilio a un vecino.
Si las condiciones meteorológicas lo permiten, las obras podrían finalizar antes de Semana Santa, cumpliendo así los plazos establecidos por la Administración local. No obstante, el Gobierno municipal descarta el traslado del lavadero, tal y como solicitan algunos vecinos, que entienden que su reubicación en la plaza pública Leopoldo Nóvoa ayudaría a ampliar aún más el camino. Sin embargo, tanto el alcalde, Luciano Sobral, como el concelleiro de Urbanismo, Gregorio Agís, ya dejaron claro en varias ocasiones las dificultades que entrañaría esta actuación.
Por otro lado, la Xunta Local de Goberno dio este lunes luz verde a un proyecto para reforzar la seguridad viaria en un tramo del vial de Campelo.
El Concello acomete la mejora del pavimento del Camiño da Granxa
La actuación, muy demandada por numerosos vecinos del lugar, también incluye la ampliación del espacio a ambos lados del vial
