Punto y final al culebrón administrativo de Pasarón. El campo de fútbol es, oficialmente, de titularidad municipal desde el pasado 15 de mayo, fecha en la que el Concello y la Deputación formalizaron el acta de recepción de las obras que la empresa Oreco finalizó hace ya cinco años.
Las discrepancias entre ambas administraciones sobre las deficiencias que presentaba el estadio retrasaron esta operación, que mantuvo la instalación deportiva en una especie de limbo administrativo y que en su día generó un enfrentamiento político entre ambas administraciones.
El acta de recepción del campo de fútbol conllevará la necesidad de realizar una revisión para verificar el estado del recinto. El Gobierno local se ha comprometido a la contratación "urxente" de una auditoría externa para comprobar si se cumplen cuestiones relacionadas con la seguridad. Y así se expone en el informe técnico que, en febrero de este año, el arquitecto jefe del Concello redactó sobre el traspaso de la instalación, que aún estaba en manos de la Deputación.
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