Eduardo Mendoza: "No me veo a la altura de las expectativas"

El escritor acaba de recibir el Premio Cervantes y ha reconocido que está "aturdido" con un galardón tan importante
Eduardo Mendoza
photo_camera Eduardo Mendoza

El escritor Eduardo Mendoza, Premio Cervantes 2016, ha mantenido este sábado un encuentro con estudiantes en el que ha reconocido que está "aturdido" tras recibir un galardón tan importante y que no se ve "capacitado para estar a la altura de la expectativas" que ha creado tras obtenerlo. Este encuentro se ha celebrado en el Paraninfo de la Universidad Complutense de Madrid, en el marco de la VII Semana Complutense de las Letras, y al que también ha asistido el rector Carlos Andradas.

Un gran aplauso ha recibido al Premio Cervantes 2016, quien ha arrancado el acto diciendo que recibir este galardón ha sido una "experiencia maravillosa" pero que, cuando se es consciente de los otros escritores que lo han obtenido, "te das cuenta de que tienes que estar a una altura". "Creo que no es la mía", ha señalado Mendoza. "Ahora me veo obligado a ser tan bueno como decían que soy y no me veo capacitado para estar a la altura de las expectativas que he creado", ha reconocido el escritor catalán.

Preguntado por El Quijote, Mendoza ha trasladado a los estudiantes que, como todas las grandes obras, debe leerse "muchas veces y a todas las edades", puesto que, cuanto antes se haga la primera lectura, la segunda será mejor. "Yo entré en la literatura adulta con El Quijote", ha indicado, para añadir que fue "una suerte" porque lo ha aprendido todo de la prosa cervantina y es como "entrar por la puerta grande".

Sobre cuáles son las enseñanzas que diría a los jóvenes, el es escritor ha manifestado que nunca pretendió dar ninguna. "Yo siempre quise escribir pero nunca ser un escritor", ha asegurado. Desde el otro punto de vista, el de lector, Mendoza ha señalado que se siguen "escribiendo cosas interesantes", si bien, su lectura favorita son los historiadores grecorromanos porque al leerlos siente como si hiciera "un retiro espiritual".

En cuanto a la crítica social en la novela, el autor ha asegurado que nunca quiso hacerla, si bien cree que el escritor debe tener una mirada sobre el mundo y "hay que ser muy tonto para no ser un poco pesimista".

Mendoza también es autor del género de humor y en este campo ha expresado que tiene "cuidado de no ofender a nadie al escribir" y se permite hacer bromas de cualquier persona. "Hay un humor que sí es ofensivo, el que tiene intención de burlarse de alguien y eso está mal", ha añadido. El Premio Cervantes también ha hecho diagnóstico de la novela actual: "Está muy viva. Hay una estupenda generación nueva que está buscando otras formas de ver la realidad pero a veces da pasos de ciego".

Comentarios