El astillero Nodosa bota un palangrero "único" en su tecnología que pescará en aguas de las Malvinas

Conde destaca la "recuperación del sector naval" en la que Galicia representa el 40 por ciento de los contratos a nivel estatal
Botadura del CFL Hunter en Marín
photo_camera Botadura del CFL Hunter en Marín

El CFL Hunter, un palangrero de 60 metros de eslora diseñado y construido por el astillero Nodosa de Marín, ha sido bautizado y botado a la ría de Pontevedra para ser destinado a la pesca de merluza negra en aguas de las Malvinas. El director comercial de Nodosa ha asegurado que un buque de estas características "no es fácil de encontrar" porque presenta "novedades que lo hacen único". Entre ellas, es "el primero en España con propulsión diésel eléctrica".

Al acto han acudido representantes de la empresa armadora Consolidated Fisheries LTD, la Asamblea Legislativa de las islas Malvinas, la Xunta, la Autoridad Portuaria y el ayuntamiento de Marín, además del propio astillero. El conselleiro de Economía, Emprego e Industria, Francisco Conde, ha destacado que hay "hechos y cifras" para asegurar que "Galicia sigue protagonizando la recuperación del sector naval a través de la calidad, la diferenciación y la innovación".

En este sentido, ha puesto a Nodosa -con una trayectoria de 40 años, una plantilla de 140 personas y más de 280 buques construidos- como "ejemplo de competitividad y profesionalidad" en la diversificación de sus áreas de trabajo y de cómo "el sector naval se está recuperando desde Marín".

El titular de Economía ha afirmado que Galicia representa el 40 por ciento de todos los contratos que se están desarrollando en España y que un tercio de esos barcos son pesqueros. "La presencia de Galicia es importante, la demanda tiene más pujanza y Galicia tiene que tener protagonismo para ganar contratos", ha destacado Conde, que desde Marín también ha trasladado el "pesar" y el "apoyo" del Gobierno gallego a los familiares y allegados del patrón de pesca José Vicente Pazos -oriundo de esta localidad-, desaparecido en el naufragio del Senefand I en aguas de Senegal.

INVERSIÓN. Por su parte, el presidente de la armadora CFL, Tom Blake, se ha referido a la construcción de este barco como un hito en la historia de la empresa, al tratarse del primer barco que construyen y suponer "la mayor inversión" de una empresa de las Malvinas para este fin.

Blake ha elogiado el nivel de entendimiento con los responsables de Nodosa para logra un barco "muy particular" para el que las dos partes han trabajado "muy de cerca". Así, el CFL Hunter está "personalizado" en base a los requisitos marcados por su propietario, cuenta con refrigeración por dióxido de carbono para congelar rápido y a baja temperatura para "garantizar un producto de alta calidad", la tecnología diésel eléctrica le permite "consumir menos combustible", ha explicado Blake, además de que es limpia y silenciosa, lo que proporciona "mejores condiciones de vida" para la tripulación, y tiene en cuenta la minimización de los descartes, además de sistemas para la protección de pájaros.

Actualmente Nodosa está construyendo un barco arrastrero para otra empresa armadora de las Malvinas representada por Tom Blake. A este se suma otro buque más, ambos para "sociedades de las más importantes" en ese archipiélago. El astillero marinense tiene siete barcos en construcción y hace escasos días ha incorporado dos contratos más, lo que suma nueve proyectos que le garantizan carga de trabajo hasta 2019. Seis de esos encargos son navíos pesqueros contratados por empresas no solo de Malvinas, sino también de Alemania y Holanda.

BOTADURA. En representación de la Asamblea Legislativa de las Malvinas, Phyllis Rendell ha resaltado la "larga y noble tradición pesquera de Galicia llevando su arte a todos los rincones del mundo" y los vínculos entre empresarios del archipiélago con socios españoles. Además, se ha referido al CFL Hunter como el primer buque pesquero con capital de las Malvinas construido en Galicia y ha augurado que será "el primero de otros barcos construidos aquí".

Phyllis Rendell, que ha ejercido como madrina del CFL Hunter en su botadura, ha protagonizado la anécdota del acto a causa de sus intentos frustrados por estrellar la botella de espumoso gallego contra el casco del buque que, finalmente, se ha precipitado contra el suelo antes de que el barco comenzase a deslizarse por la grada hacia las aguas de la ría.

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