Opinión

El sentir galeguista mexicano

UN GALLEGO que se siente gallego, se siente aquí o en la luna. Eso está claro. Y mucho más cuando te están recordando continuamente tu tierra, y más aún si cabe en unos días en los que Galicia vive uno de los peores momentos de su historia por la ola de incendios. Pero no hay que olvidar que aquellos que aún no siendo gallegos, tienen sus raíces aquí, pueden sentir tanto o más apego a la tierra. O si no pregúntenselo al alcalde de Lalín, Rafael Cuíña, y al de Silleda, Manuel Cuíña (no son familia, que yo sepa, ya que seguramente se lo están preguntando) que están en México celebrando los 150 años del Centro Lalín-Silleda-Agolada en Buenos Aires.

Allí, los regidores dezanos están como en casa. Y es que estos mexicanos se sienten gallegos, y lamentablemente hasta comparten con nosotros grandes tragedias, como es en su caso los terremotos sufridos recientemente. Este fin de semana el alcalde lalinense visitó la Federación de Sociedades Galegas y el Museo da Emigración Galega e Arxentina, donde se encuentra la placa original de la ‘Unión do partido de Lalín’, en honor a los represaliados por el franquismo en la comarca de Deza. Como no me esperaba menos de él, siempre mirando por los suyos, solicitó la placa para traer a Lalín. ¿Qué le responderán? Espero que venga con ella bajo el brazo. Además, el regidor se comprometió a colaborar activamente con el museo, pues qué menos que traer un regalito tan especial para Lalín.

Que por cierto, Cuíña, este no, el de Silleda, se trae un volumen de los orígenes del centro y un banderín con el escudo del club de la entidad.

Y ya para terminar, quería felicitar al concejal del PP de Cuntis Toño Pena, que estuvo de cumpleaños el sábado y le coincidió con el VI Congreso da Monxa do Penedo, por lo que pudo celebrarlo de una manera peculiar.

Comentarios