La semana pasada el Hola nos sorprendió con un reportaje de Carmen Martínez Bordiu, en el que la "sesentañera" Carmen nos confiesa que está iniciando una relación con un joven australiano y cuando digo joven me refiero a un recién estrenado treintañero (32) de origen australiano, con estos dos datos ya nos hacemos a la idea de que el australiano tiene que estar estupendo. Además dice ella que la tiene encantada, y no hace falta que lo jure porque luce una sonrisa en la revista que junto con el "archiconocido Photoshop" le sacan 20 años de encima. En la revista también nos cuenta que su familia lo aceptó con naturalidad y es que como diría una abuela de Lugo "xa están afeitos", bueno todos menos su hija pequeña, lo que ya nos dice bastante de la pequeña de la familia, que debe ser la más normal. Porque la madre cada año que pasa nos demuestra que sigue con la cabeza de los 15, y en absoluto es una crítica, más quisiera yo que poder seguir viviendo como una adolescente, pero con tarjetas de crédito.
Carmen nos cuenta que el flechazo se fraguó en alta mar. Se conocieron este verano en un yate en el que estaban disfrutando de una reunión con unos amigos en común y desde entonces se han vuelto inseparables. Timothy, que es como se llama, es el personal trainer y coach espiritual de Carmen, ya que es experto en terapias emocionales y guía en temas de carácter sentimental. No es de extrañar, entonces, el entusiasmo que muestra la Bordiú con esta nueva etapa vital, ya que parece que el joven experto en terapias emocionales le ha contagiado sus dotes para equilibrar su vida y centrarse en ella misma.
Lo conoció en julio y ya viven juntos, y es que hay edades en las que no se debe perder el tiempo. Aunque para mí se pierde más el tiempo jugando a los novios, si yo fuera ella no metería al australiano en casa porque hay edades, también, en las que la tranquilidad de tu sofá no tiene precio.
Carmen Martínez Bordiu es uno de esos personajes, que yo defino como funcionarios del Hola, como lo fueron en su día Carmina Ordóñez, o la Duquesa de Alba y parece que la nieta de ambas va a seguir también este camino. Todas se han pasado la vida diciendo eso de "hago lo que me apetece, lo que quiero", ese es su leitmotiv. Claro que es un muy fácil hacer lo que te sale de la peineta si estás forrada y tu único trabajo se reduce a salir en el Hola bien guapa y bien retocada. Es más difícil hacer lo que quieres cuando no hay dinero en el bolsillo y todos los días te esperan en el trabajo a las 8:00 am.
