Opinión

Saltando el charco

La misión empresarial organizada por el Concello llega a México

TENGO QUE confesar que los aviones, lo que se dice encantar, no me encantan y prefiero viajar con los pies en la tierra (en el sentido literal de la frase). Pero el continente americano siempre me ha fascinado y quizá por eso me dan tanta envidia (de la sana, por supuesto) los miembros de la comitiva encabezada por el alcalde mi Lores y la concejala de Promoción Económica, Anabel Gulías, que el martes partió rumbo a México. El grupo, formado también por un buen nú- mero de empresarios pontevedreses y por representantes de varios medios de comunicación, llegará hoy a la capital del país y tiene por delante una apretada agenda de actos y visitas.

Aún así, espero que saquen un hueco para disfrutar un poco de México D.F., probar la gastronomía local (aunque sin pasarse con el picante) y contemplar algún espectáculo de rancheras. No me digan que no se imaginan a mi Lores con un sombrero charro gritando al viento un "¡ándele mis cuates!". Igual peco de caer siempre en los topicazos, pero sería genial.

Y otro que pronto cruzará el charco es el coronel de la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra, Miguel Estévez Lara, que el próximo 1 de septiembre tomará posesión como consejero del Ministerio de Interior de la Embajada Española en Chile.

Y se nota que el coronel Estévez ya ha estado documentándose para su viaje, porque este mismo martes demostró que conoce muy bien la geografía chilena. Lo que no tiene tan controlado es cocinar, pues en otras misiones internacionales en las que participó, el grupo contaba con un cocinero, pero en esta ocasión viajarán solo tres personas y tendrán que prepararse la comida ellos mismos. Por este motivo, el coronel comentó que está pensando en realizar un curso de cocina, a ver si se pone al día con los fogones. Le vendría muy bien, ya que va a estar cuatro años en ese destino y, además, cuando regrese pasará a la reserva, así que tendrá mucho más tiempo para perfeccionar las técnicas culinarias que aprenda ahora. A ver si a la vuelta sorprende a su familia y amigos con unos platos chilenos.

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