Luces, cámara, ¡acción! Lo que les voy a contar no es una película, pero se merece mucho más que un canal de Youtube, por muchos millones (sí, mi-llones) de veces que hayan sido vistos sus vídeos. Hay un pontevedrés de pura cepa que se lo ha pasado de maravilla en la boda del año. No, no la de Pippa Middleton con James Matthews, sino la boda de Laura Escanes y Risto Mejide. ¿Y quién podría haber ido a tan magno evento? Pues Pablo Cimadevila. El mismo. Ya les he contado en otras ocasiones, y si no lo he hecho me han de perdonar por semejante error, que Pablo no ha dejado de ser una megaestrella a pesar de que ya no cuenta con un reality en D-Max sobre su vida. El nadador olímpico oro en Sidney y orfebre brutal donde los haya cuenta con un canal de Youtube y Facebook en el que algunos de sus vídeos —por ejemplo, el que colgó con motivo del compromiso de su hermano— han recibido seis millones de visionados. Pero no me alejo del motivo de mi crónica. Pablo fue ayer a la boda del presentador y publicista y su polifacética novia.
Eso se podía extraer de su cuenta de Twitter, en la que colgó la foto del avión en el que se desplazó a entregar un encarguito a Mejide&Escanes. Y es que él realizó las alianzas de la pareja. Y no solo eso, sino que también son de su autoría los pendientes de la novia (los del novio, ya no sé). Lo que no he podido ver fueron las piezas, pues parece que se trata de una boda blindadas. Pero les aseguro que en cuanto les eche un ojo, tendrán mi reseña. No puedo cerrar sin hablar de la Gala do Libro Galego 2017. Ha habido premios para Libraría Paz y para Kalandraka. Tengo que besar efusivamente a los premiados y más efusivamente aún a Ramón Rozas, mi compañero, finalista en la categoría de Periodismo Cultural, que siempre será el mejor para nosotros. Toda la información sobre la gala la tienen en la crónica de Belén López, en Vivir Aquí, en la página 54.
Luces, cámara, ¡acción! Lo que les voy a contar no es una película, pero se merece mucho más que un canal de Youtube, por muchos millones (sí, mi-llones) de veces que hayan sido vistos sus vídeos. Hay un pontevedrés de pura cepa que se lo ha pasado de maravilla en la boda del año. No, no la de Pippa Middleton con James Matthews, sino la boda de Laura Escanes y Risto Mejide. ¿Y quién podría haber ido a tan magno evento? Pues Pablo Cimadevila. El mismo. Ya les he contado en otras ocasiones, y si no lo he hecho me han de perdonar por semejante error, que Pablo no ha dejado de ser una megaestrella a pesar de que ya no cuenta con un reality en D-Max sobre su vida. El nadador olímpico oro en Sidney y orfebre brutal donde los haya cuenta con un canal de Youtube y Facebook en el que algunos de sus vídeos -por ejemplo, el que colgó con motivo del compromiso de su hermano- han recibido seis millones de visionados. Pero no me alejo del motivo de mi crónica. Pablo fue ayer a la boda del presentador y publicista y su polifacética novia. Eso se podía extraer de su cuenta de Twitter, en la que colgó la foto del avión en el que se desplazó a entregar un encarguito a Mejide&Escanes. Y es que él realizó las alianzas de la pareja. Y no solo eso, sino que también son de su autoría los pendientes de la novia (los del novio, ya no sé). Lo que no he podido ver fueron las piezas, pues parece que se trata de una boda blindadas. Pero les aseguro que en cuanto les eche un ojo, tendrán mi reseña. No puedo cerrar sin hablar de la Gala do Libro Galego 2017. Ha habido premios para Libraría Paz y para Kalandraka. Tengo que besar efusivamente a los premiados y más efusivamente aún a Ramón Rozas, mi compañero, finalista en la categoría de Periodismo Cultural, que siempre será el mejor para nosotros. Toda la información sobre la gala la tienen en la crónica de Belén López, en Vivir Aquí, en la página 54.
